Tamiahua, Ver. – La alcaldesa electa de Tamiahua, Citlali Medellín Careaga, marcó este fin de semana un contraste evidente entre la nueva administración que prepara y el desgaste del gobierno saliente. Mientras sus futuros directores y encargados de área participaron en dos intensas jornadas de capacitación sobre el proceso de entrega-recepción y la operación administrativa –incluyendo la Ley Orgánica del Municipio Libre–, el actual presidente municipal Ernesto “Don Neto” Lara continúa destinando recursos del erario en abogados para sostener una impugnación que parece más un capricho personal que un ejercicio de justicia.
Los cursos, impartidos por el próximo tesorero municipal Jorge Arturo Morales Ramírez, reforzaron la preparación del equipo entrante para dar un arranque con orden y profesionalismo el próximo 1 de enero. “Seguimos avanzando con un solo propósito: dar lo mejor de nosotros para sacar a Tamiahua del rezago en el que se encuentra”, declaró Medellín, agradeciendo la disposición de sus colaboradores.
Pero la parte más dura de su mensaje apuntó al alcalde saliente: “Mientras Don Neto sigue pagando abogados del presupuesto del pueblo para seguir impugnando la elección, nosotros seguimos trabajando, capacitándonos y preparándonos para la entrega-recepción, para hacerles auditoría y, por supuesto, para estar a la altura de todas las necesidades inmediatas de nuestro municipio”, advirtió.
Opinión
En política los tiempos son claros: la ciudadanía ya eligió y el relevo está en marcha. Aferrarse al poder con recursos judiciales financiados por el erario no solo es una derrota moral, sino una burla para los tamiahuenses que exigen soluciones, no pleitos.
Citlali Medellín se prepara para gobernar con un equipo entrenado y con metas definidas. “Don Neto”, en cambio, insiste en pagar abogados para sostener lo insostenible. La diferencia no podría ser más evidente: unos ya se van, aunque no lo entiendan; otros llegan listos para trabajar.
