Perfecto, Antonio 🙌. Te propongo esta nota en tono crítico, como lo planteas, contrastando la fantasía de “potencia mundial” con la cruda realidad de la playa abandonada bajo la administración de Guadalupe Rodríguez:
La cruda realidad de Tamiahua bajo la administración de Guadalupe Rodríguez
Tamiahua, Ver.– Hace apenas un año, en agosto de 2023, algunos funcionarios presumieron con entusiasmo a Tamiahua como “la próxima potencia turística mundial”. En aquel entonces, llegaron a la villa a disfrutar de un rato de playa y gastronomía, a posar para la foto y a vender la idea de un paraíso en potencia.
Pero la realidad, hoy en día, es otra muy distinta.
La llamada “potencia mundial” está sumida en el abandono. La playa principal de Tamiahua luce descuidada, sin limpieza, con montones de basura y sin personal de Protección Civil para atender a los visitantes. A esto se suma la falta de regulación en servicios turísticos improvisados, como el alquiler de motocicletas sin control, lo que aumenta los riesgos para turistas y locales.

Mientras los discursos oficiales hablaban de grandeza y de un futuro brillante para el turismo, la administración municipal encabezada por Guadalupe Rodríguez ha dejado que las carencias básicas se impongan sobre cualquier sueño de desarrollo: no hay drenaje ni agua entubada suficientes, los accesos se vuelven lodazales en temporada de lluvias y la imagen del municipio se deteriora ante la vista de propios y extraños.
¿Dónde están ahora aquellos funcionarios que se llenaron la boca hablando de “potencia turística”? ¿Dónde quedaron las promesas de modernización y atención a los servicios básicos? ¿Que puede decir de esto el Director de Turísmo del Ayuntamiento? Hoy los hechos demuestran que aquel viaje de promoción fue más un paseo con tintes vacacionales que un verdadero compromiso con el pueblo de Tamiahua.
La villa no necesita discursos grandilocuentes ni fotos de ocasión, sino acciones concretas para rescatar su imagen y su futuro turístico. Porque mientras algunos se empeñan en vender espejitos, la realidad es que Tamiahua se está quedando atrás, víctima del abandono oficial y de una administración que parece mirar hacia otro lado. ¡Lo bueno que ya se va!